top of page

Rindete ante tu propio ego

¿Cuál es la diferencia entre rendirme ante mi propio ego y rendirme ante lo que verdaderamente necesita mi cuerpo, mente y alma? Me doy cuenta que cuando les menciono la palabra “RINDETE” la respuesta siempre es: “pero si de hecho ya estoy muy rendida ante todo”. El primer punto es: NO confundas rendida con cansada. El segundo punto es: debes ser consciente ante qué cosas rendirte, es decir, desde nuestra mente ego todo el tiempo estamos luchando por esa situación, persona, cosa que queremos lograr pero que llega un momento en que simplemente ya no queremos hacer nada porque pensamos que ya nos hemos esforzado mucho y no conseguimos estar mejor, sin embargo, seguimos pensando en el fondo de nuestro Ego que un día lograremos llegar a esa meta u objetivo que un día nos pusimos. Una vez les menciones que todo el tiempo cambiamos: las situaciones cambian, las personas cambian, los sentimientos cambian y los tiempos y momentos cambian, y el principal problema es que nuestro Ego piensa que todo sigue igual o peor aún que todo puede estar “igual de bien que antes” y entonces es cuando decimos “ME RINDO” pero con un mensaje oculto de “NO TENGO IDEA POR DONDE IRME O QUE HACER, PERO MI OBJETIVO SIGUE EN MENTE”. A lo que voy es que cuando todo ha cambiado en nuestra vida es muy probable que la meta u objetivo que teníamos planeado haya cambiado también, es decir, tal vez un momento de tu vida anhelas algo, pero ahora ya no es lo que verdaderamente anhelas y sobretodo necesitas para tu crecimiento. Cuando yo les hablo de que necesitas rendirte me refiero a que necesitas dejar de hacerle caso a las exigencias de tus Egos por lograr algo que en un momento anhelabas. Rendirnos significa aceptar la verdadera derrota de permitirnos vernos también como personas perdedoras, débiles, o como quieras llamarte por no lograr algo que tu Ego quería. Rendirnos no significa dejar simplemente de accionar para llegar a un camino, sino que significar que también tenemos que dejar de pensar que solo esa situación, persona, o cosa es lo único que puede hacerme sentir bien. Finalmente, cuando decidimos rendirnos ante nuestro propio Ego es cuando dejamos de sentir angustia a cada momento porque la angustia proviene de lo angosto y eso es provocado porque nuestro camino lo volvemos demasiado angosto pensando que solo logrando “ekis” meta en mi vida podré ser feliz. Si logramos rendirnos ante el Ego también estamos permitiéndonos percibir nuestro presente para poder así analizar qué es lo que verdaderamente necesito para crecer y mejorar. Nos permitimos ser más conscientes para poder tomar otros caminos que nos lleven a lugares que por Ego nunca nos dimos cuenta que eran posibles llegar. Pregúntate cuál es tu mayor Ego, y cuál es la necesidad oculta que no te permite rendirte ante él. porque sino te rindes ante el Ego, simplemente te rindes ante tu propio centro.


bottom of page